Biocombustibles para los coches diésel: Stellantis, uno de los principales grupos automotrices del mundo, anunció recientemente un avance significativo: la aprobación del uso de biocombustibles en sus automóviles diésel. Esta iniciativa permite a los propietarios de vehículos diésel Stellantis adoptar una solución alternativa que promete reducir las emisiones de CO2 y apoyar la transición verde en el sector automotriz.

El biocombustible es un tipo de combustible producido a partir de materias primas de origen biológico, como aceites vegetales, residuos agrícolas o incluso grasas animales. A diferencia de los combustibles fósiles tradicionales, los biocombustibles son renovables y a menudo se derivan de procesos de residuos, lo que los convierte en una opción más sostenible. El uso de biocombustibles, como el biodiesel, reduce significativamente las emisiones de gases de efecto invernadero en comparación con los combustibles tradicionales.

Biocombustibles, la alternativa a la electricidad

Por tanto, los vehículos Stellantis, incluidos los comerciales, pasan a ser compatibles con este diésel HVO. Incluso lo son los actualmente en circulación, con motores Euro 5 y Euro 6 y las siglas XTL. Además, según algunos análisis realizados por ADAC, parece que este biodiésel, aunque no reduce drásticamente la cantidad de dióxido de carbono emitido en el escape, sigue siendo más limpio que el diésel tradicional, con una disminución de entre el 2 y el 5%.

Sin embargo, si nos centramos en todo el proceso productivo, podemos decir que reduce las emisiones en un 90%. En particular destacamos la ausencia de azufre y el bajo contenido en compuestos aromáticos y contaminantes.

 

Los motores Stellantis compatibles con biocombustible son las unidades 1.3 MultiJet, 1.6 MultiJet, 2.0 MultiJet, 2.2 MultiJet, Nuevo 2.2 MultiJet 4.0, 3.0 V6 MultiJet y 2.3 MultiJet (F1A – Fiat Ducato).

 

Stellantis, que incluye marcas de prestigio como Peugeot, Citroën, Fiat, Alfa Romeo, Jeep y Opel, está implementando una estrategia global para contribuir a reducir la huella de carbono de todo el Grupo.

 

La aprobación del uso de biocombustibles para motores diésel es un paso decisivo en esta dirección. La compañía aclaró que los biocombustibles aprobados han sido rigurosamente probados para garantizar un rendimiento y confiabilidad sin concesiones, permitiendo a los usuarios disfrutar de una alternativa ecológica sin la necesidad de modificar sus vehículos.

 

La adopción de biocombustibles trae diversos beneficios para el medio ambiente, ayudando a reducir las emisiones de CO₂ y promoviendo una cadena de producción más sostenible. Además, el uso de biocombustibles requiere adaptaciones mínimas para los motores diésel Stellantis existentes, lo que hace que esta transición sea más accesible para los consumidores.

 

Desde un punto de vista operativo, los biocombustibles son compatibles con la red de distribución existente, por lo que los consumidores pueden repostar de forma similar a los combustibles tradicionales. Esto supone una importante ventaja para todos aquellos que, a pesar de no poder o querer adquirir un vehículo eléctrico o híbrido, quieran contribuir de forma responsable a la reducción de emisiones.

 

La adopción de biocombustibles para motores diésel forma parte de la estrategia a largo plazo de Stellantis para lograr cero emisiones netas de aquí a 2038. Esta visión pasa por la electrificación de toda la gama de vehículos, con un número cada vez mayor de modelos eléctricos e híbridos, como por el uso de tecnologías alternativas como los combustibles renovables.